Argecilla (Guadalajara)

Qué ver y hacer en Argecilla

Argecilla se encuentra ubicada en el tramo alto del valle del río Badiel, en un tramo donde el río todavía permanece encajonado ofreciendo un paisaje de contrastes de gran belleza: por un lado las parameras alcarreñas dominadas por extensos campos de cereal sin apenas interrupciones, por otro las huertas y sotos que el río Badiel abastece en la vega y, entre ellos, verticales escarpes calizos de roca desnuda cubiertos de matorral en las solanas y pinos con encinas en las umbrías. Sin duda al viajero que llega a la población por la carretera no le dejará indiferente el descenso de casi 150 metros desde el que se obtienen hermosas vistas del valle.

El caserío de Argecilla se instala en la margen derecha del río, desparramado por la vertical ladera para preservar las mejores tierras al cultivo y protegerse de las crecidas del Badiel. Paseando por sus calles encontramos numerosas fuentes donde poder refrescarnos y bonitos ejemplos de casas tradicionales de buena traza fabricadas en sillarejo junto a sencillas construcciones de adobe y tapial resistiendo el paso del tiempo. En la plaza mayor destaca por su tamaño y calidad el caserón de los marqueses de Argecilla fechado en 1696. A escasos metros encontramos la iglesia de San Miguel Arcángel, edificio del siglo XVII de tres naves que sorprende por sus dimensiones.     

Excavaciones realizadas en el siglo XIX en los albores de la investigación arqueológica, sacaron a la luz restos neolíticos que indican un poblamiento temprano. Al viajero observador le llamarán la atención varias construcciones de hormigón que flanquean el valle estratégicamente. Se trata de búnkeres levantados por las tropas nacionales durante la Guerra Civil tras la batalla de Guadalajara.