Pelegrina (Guadalajara)

Las primeras informaciones que se tienen de Pelegrina datan del siglo XII, cuando formaba parte del obispado de Sigüenza y contaba con unos cincuenta vecinos. Tras la conquista cristiana de la zona y de la ciudad de Sigüenza en 1124, Alfonso VII entregó el lugar a los obispos de Sigüenza, que lo incorporaron a este Señorío y en cuyas manos permaneció hasta su abolición.

 

 

Qué ver y hacer en Pelegrina

En el valle del río Dulce, en la loma de un cerro presidido por su castillo roquero, hoy en ruinas, se alza este pueblo que desde el siglo XII perteneció al señorío de los obispos seguntinos. Fueron ellos quienes construyeron la fortaleza como residencia estival y la iglesia románica del pueblo, dedicada a la Santísima Trinidad.

El castillo, y con él su población, sufrió los avatares de la historia, en 1710 sufrió un gran incendio y fue derruido durante la Guerra de Sucesión. Durante la Guerra de Independencia fue testigo del paso del Empecinado y en 1811 fue destruido por las tropas francesas en retirada, y esta es la imagen que hoy se nos muestra. Su iglesia, de una sola nave, tiene su presbiterio recto, ábside semicircular y espadaña a los pies. Su atrio porticado del siglo XVI, cobija una portada con arquivoltas lisas en cuyo tímpano luce el escudo del obispo D. Fadrique de Portugal, benefactor de este templo en época renacentista.

La ubicación de Pelegrina es excepcional dentro del Parque Natural del Barranco del Río Dulce y su fama está vinculada a la de Félix Rodríguez de la Fuente, quien rodó en estos parajes varios capítulos de la serie “El hombre y la tierra”. Pelegrina se alza sobre uno de los meandros del río, sobre el que es usual ver planear buitres y otras aves rupícolas. A la salida se alza un mirador sobre el barranco inaugurado en 1980 y dedicado al famoso naturalista.  Aquellas personas que quieran más información sobre este entorno natural pueden visitar el Centro de Interpretación ubicado en la localidad.  

Información práctica

Rev. ALC: 23.05.22